El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Palma ha admitido a trámite un recurso contencioso administrativo interpuesto por los portavoces políticos Miquel Cifre (PSOE) y Antoni Reus (PSM) contra el otorgamiento del secretario municipal para segregar los terrenos de la finca rústica de Son Real en cuarenta y tres fincas con derechos edificatorios, algunas de las cuales están afectadas por la construcción de un futuro campo de golf con un hotel de lujo.
El edil socialista, Miquel Cifre, dijo ayer que «además del campo de golf, esto encubre una urbanización». Así lo anunciaron durante una mesa redonda que ayer organizó la Plataforma Son Real No té Preu.
De esta manera, el juzgado reclama al Ajuntament que «remita en un período de veinte días el expediente administrativo del caso».
El año 2002 los propietarios de la finca de son Real pidieron al alcalde Antoni del Olmo (PP) que les entregase un certificado que «acreditara que la división que hicieron de su finca a través de una escritura pública en el año 1997 no precisaba una previa licencia por ser anterior a la Ley del Suelo rústico de julio de 1997».
La parte demandante expone que el secretario municipal certificó en el año 2002 que no era necesario ningún tipo de licencia «sin disponer de ningún expediente ni informe técnico que así lo valorase». El secretario indica que «teniendo en cuenta la ley es precedente declarar de innecesaria la licencia municipal de segregación de estos actos por motivo de que no era exigida en aquel momento (en el año 1997) según la legislación autonómica».