La carretera C-713 que conecta las localidades de sa Pobla y Alcúdia se reabrirá de nuevo al tráfico el próximo 24 de febrero después de un mes cerrada por obras. El conductor recorrerá a partir de ahora el trazado definitivo que tendrá esta vía que está siendo reformada íntegramente por el Consell de Mallorca, aunque los trabajos no concluirán completamente hasta el próximo mes de junio.
El importante movimiento de tierras que se está desarrollando estos días, con la carretera cerrada al tráfico general, da paso a una nueva vía de siete metros de anchura y completamente llana. Quedan atrás los constantes cambios de rasante y alguna que otra curva peligrosa de la que a estas alturas ya no queda rastro alguno.
La empresa Coexa, encargada de las obras de reforma, ya ha comenzado a asfaltar algunos tramos aunque fuentes del departamento de carreteras del Consell de Mallorca confirmaron que «en el momento de reabrirse la carretera aún faltarán algunos tramos por asfaltar y salvo por el hecho de que los coches recorrerán ya el trazado definitivo, no hay que esperar más cambios». Y es que todavía quedará pendiente de construcción la rotonda que facilitará el acceso a la carretera vieja de Pollença a la altura de Jardinerías Visanyes, uno de los principales puntos negros de la antigua vía, donde las máquinas trabajan a destajo estos días.
La reforma de la carretera de Alcúdia comenzó en diciembre de 2004 y tenía un plazo de ejecución de un año aunque las obras no concluirán hasta principios del próximo junio.