GORI VICENS
Los cuatro regidores del PSOE en el Ajuntament de Felanitx
abandonaron la sesión plenaria convocada por la alcaldesa para
resolver el recurso presentado por el PSOE referente al cobro de
las cuotas de urbanización de Cas Corso, una cuestión que había
levantado polémica en el pasado pleno municipal cuando no se
contaron los votos de los regidores socialistas.
Ahora, en el pleno del pasado jueves por la noche, los regidores del PSOE abandonaron el Ajuntament «en señal de protesta por la actitud antidemocrática de la alcaldesa Soler» y por «haber convocado un pleno extraordinario urgente, improcedente e ilegal».
El pleno empezó con el pronunciamiento sobre la urgencia de la convocatoria. Intervino Jerònia Muñoz (PSOE), quien explicó que «la convocatoria es una maniobra del equipo de gobierno, mal asesorado por los servicios jurídicos. En 24 horas, no hemos tenido tiempo para estudiar todos estos informes, el texto redactado es para confundir y menospreciar la oposición. El pleno se tendría que haber convocado con dos días de antelación, por tanto, los acuerdos adoptados podrían ser declarados nulos de pleno derecho. Por eso, pedimos la anulación del pleno».
Jaume Binimelis, portavoz del grupo municipal socialista, indicó que «el PP ha utilizado vilmente mi moción a lo largo de estos días, después del pasado pleno».
Una hora antes del pleno la alcaldesa había convocado la junta de portavoces con la intención de esclarecer todas las dudas jurídicas sobre este tema. «En la junta, el PSOE no ha pedido nada sobre la ilegalidad del pleno», señaló Soler.
Pasado a votación el asunto, la urgencia del pleno recibió los votos favorables del PP y los contrarios del PSOE y PSM, y la abstención de UM, EU-EV y Grupo Mixto.
Ya en el debate del pleno, Miquel Julià (UM) explico que «es un tema complejo que remolcamos desde hace años. Ante la diversidad de opiniones de los servicios jurídicos de los distintos partidos, mi voto será de abstención».