El Ajuntament d'Inca ha concedido dos licencias de obra al Institut Balear de la Vivienda (Ibavi) para la construcción de 77 viviendas en un solar calificado como zona verde en el solar de Mandrava antes de que el Consell aprobara el Plan de Ordenación Urbana del municipio (PGOU) que recalificó este espacio como suelo urbano. «El Ajuntament concedió una primera licencia de obra en relación al proyecto básico presentado por el Ibavi, otra para dotar la zona de servicios, ya que no tenía por no estar urbanizada, y después, al recibir la solicitud del Ibavi para la licencia definitiva y no pronunciarse el Ajuntament en un mes, ha concedido indirectamente una tercera. Es increíble la cantidad de contradicciones en las que cae Rotger», explicó ayer el portavoz del PSIB-PSOE Xavier Ramis, en una rueda de prensa conjunta de toda la oposición (PSOE, PSM, UM e Independents) para denunciar el oscurantismo que existe en el área de Urbanismo de Inca encabezada por el teniente de alcalde, Bartomeu Seguí.
La oposición criticó especialmente la actitud «chulesca» que ha mantenido el alcalde en relación a la licencia ilegal de Mandrava. «Rotger se ríe de todo el mundo si cree que nos creemos que se han avanzado las obras para evitar la época de lluvias. ¡Ni que Inca fuese Tailandia! Está clarísimo que sólo ha buscado que la obra esté acabada antes de elecciones», dijo el regidor de Independents d'Inca, Àngel García, que añadió que la construcción de viviendas sociales en Inca tenía otras soluciones. «El alcalde miente cuando dice que ha trasladado la zona verde al solar de al lado. Lo que ha hecho ha sido urbanizar estos terrenos e incorporar los metros cuadrados que corresponden al Ajuntament como zona verde. Por tanto, no ha creado ninguna zona verde nueva sino que ha suprimido una entera», dijo. La oposición criticó además que el PGOU no incluya terrenos para hacer viviendas sociales.