La fiesta del voluntario que anualmente organiza la Cruz Roja de Sóller sirvió ayer para recordar la figura de la que fuera presidenta de dicha entidad desde 1990, María Vázquez, así como también corresponsal de Ultima Hora en la comarca, fallecida recientemente víctima de una grave enfermedad. Para ello, la Cruz Roja de Sóller varió los actos que venía desarrollando anualmente para rendir un cálido y emotivo homenaje consistente en una misa y una ofrenda floral en el cementerio municipal. La iglesia del convento de los Sagrados Corazones de Sóller sirvió para recordar con una misa a la figura de María Vázquez.
En los bancos de la iglesia se sentaron diferentes autoridades de la comarca, encabezadas por los alcaldes de Sóller y Fornalutx, Carlos Simarro y Joan Albertí, así como por el viudo de María Vázquez, Mateu Cifre, familiares y la junta local de la Cruz Roja, que preside provisionalmente Jeroni Bisbal. Una vez finalizada la misa, los asistentes se dirigieron al cementerio municipal de Son Sang, donde se reunieron unas cincuenta personas, en un sencillo y muy emotivo acto que se celebró en los alrededores de la tumba donde descansan los restos de María Vázquez. Un cuarteto de saxofones de alumnos de la Escola de Música empezó el acto con el «Ave María» de Schubert, seguido por el «Adagio» de Albinoni.
Durante el acto, se procedió a la lectura por parte de voluntarios de la Cruz Roja de dos poemas, de Josep Sebastià Pons y de María Mayol. Entre los asistentes, además de los ya mencionados anteriormente, había una amplia representación de los cuerpos de emergencia de las Islas, como bomberos, Salvamento Marítimo, 112, SAR, Policía Local, Guardia Civil y Protección Civil, así como regidores del Consistorio solleric, amigos y un representante de la Vicepresidència del Govern balear. Un ramo de flores de la Delegación del Gobierno y otro de voluntarios de la Cruz Roja fueron depositados en su tumba.