La Conselleria de Medi Ambient del Govern de les Illes Balears ha puesto en marcha una nueva campaña de fumigación para combatir la procesionaria, campaña que comenzó la pasada semana cuando las avionetas sobrevolaron los términos municipales de Santa Margalida, ses Salines y Campos.
Fuentes de la Conselleria informaron ayer de que ya se han fumigado 1.500 hectáreas y la semana próxima, si el tiempo lo permite, la campaña se extenderá a 1.000 hectáreas más, esta vez en el término municipal de sa Pobla. El producto que se vierte tiene el nombre de Vacillus Turingencis y es un producto biológico inocuo para las personas y animales que solo mata a los gusanos y mariposas de la procesionaria por lo que no tiene efectos sobre las setas o cultivos, según explicaron desde el Govern.
Las zonas en las que se vierte el producto son principalmente zonas despejadas y de uso público, como las áreas recreativas, consideradas zonas de riesgo.
Fuentes de la Conselleria de Medi Ambient del Govern de les Illes indicaron que el último balance que se ha hecho de la procesionaria revela que ha sido erradicada en Menorca y en Mallorca el nivel de riesgo ha bajado de los 4 o 5 puntos en que estaba estancado a los niveles 1, 2 y 3 de mínimo riesgo.
Por ese motivo lo que se hace ahora es repasar las zonas de uso público para controlar los pequeños focos aún existentes y evitar así su reproducción.