A.G.
El Juzgado de Instrucción número 4 de Manacor ha archivado una
denuncia presentada por el editor del diario «El Mundo», Pedro J.
Ramírez, contra dos periodistas del Grup Serra a los que acusó de
los presuntos delitos de coacciones, allanamiento de morada y
amenazas, así como de descubrimiento y revelación de secretos.
El redactor Toni Gomis y el fotógrafo Miquel Àngel Cañellas fueron acusados por cumplir con su trabajo profesional.
Ambos se limitaron a cubrir una información en la Costa dels Pins relacionada con la vuelta a Mallorca a pie de la también periodista Martha Zein.
En un auto razonado de seis folios la jueza pormenoriza cada uno de los tipos penales para concluir que «los hechos no son constitutivos de infracción penal» y decreta el archivo de las diligencias.
La representante del Ministerio fiscal, asimismo, pidió el sobreseimiento provisional «al no haber quedado debidamente acreditada la perpetración de infracción penal alguna».
Los hechos
El pasado 14 de julio el redactor Toni Gomis y el fotógrafo Miquel
Àngel Cañellas se desplazaron a Costa dels Pins para hacer un
reportaje de la serie dedicada a la periodista Marta Zein, que
bordeó toda la costa de Mallorca a pie.
Una vez allí, fueron testigos de cómo los guardas jurado del chalet de Ramírez le impedían el paso por el dominio público marítimo terrestre.
Los vigilantes avisaron a la Guardia Civil, cuyos agentes identificaron a Zein y a las personas que se encontraban junto a ella.
En todo ese tiempo no se registró ningún incidente.
Sin embargo, y al día siguiente, un representante legal de Ramírez denunció ante la Guardia Civil a Zein, Gomis y Cañellas.
Según la denuncia, todos ellos habían intentado de manera violenta «irrumpir en la residencia (de Ramírez), lo que fue posible impedir al estar presente el servicio de seguridad privado contratado». «Y no sólo eso», prosigue la denuncia, «sino que con grave atentado para la intimidad y seguridad de los que allí estaban, a la hija de mi representado y a sus amigas se las grabó y realizó fotografías en el interior de su residencia, captando su imagen en un ámbito que sólo pertenece a la intimidad personal, que no puede verse conculcado a través de estas conductas que sólo buscan acosar a mi representado en todos los órdenes sociales de su intimidad, al objeto de torcer su voluntad y línea editorial del diario que dirige».
En los interrogatorios, donde la fiscal manifestó un especial interés por determinar las acusaciones de Ramírez, se puso de manifiesto que los periodistas del Grup Serra en ningún momento intentaron penetrar en el dominio público donde se encuentra la piscina ni en la propiedad privada, y que su único objetivo era informar de una situación de interés general, no fotografiar niñas en bañador.
Pedro J. Ramírez acusó también al profesor Jaume Sastre, líder del Lobby per la Independència, quien declaró que se encontraba en el lugar porque seguía puntualmente la andadura de Martha Zein a través de la página web de la periodista, y que decidió conocer de primera mano si la dejaban pasar por la Costa dels Pins.
«Cómplices»
En la denuncia, Ramírez acusaba a Sastre y a «sus cómplices» de
intentar «por dos veces» asaltar su residencia.
Pero tanto el profesor independentista como el propio guarda jurado del periodista negaron este extremo.
El vigilante explicó a la jueza que el profesor se mantuvo alejado 30 metros de la piscina y que no se movió de allí. También reconoció que los agentes de la Guardia Civil no le detuvieron, sino que paró su vehículo para hablar con ellos y ser identificado.
La titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Manacor, Elena Lillo, ha decretado el archivo provisional que le había solicitado Eduardo Valdivia, abogado Toni Gomis y Miquel Àngel Cañellas, sin llegar a interrogar a Martha Zein.