Los ayuntamientos deben mejorar las redes de agua potable y evitar de esta forma la perdida de cantidades ingentes del preciado líquido. Con este objetivo, cada cierto tiempo las instituciones ofrecen ayudas a las administraciones locales conscientes de que sus presupuestos no son suficientes para emprender obras de esta envergadura.
Aun así, el problema no acaba de solucionarse y, por este motivo, este año, el Govern de les Illes y el Consell de Mallorca realizarán una nueva convocatoria de subvención de proyectos. Dos millones de euros será la cantidad que estos dos organismos repartirán entre los ayuntamientos de la Isla que lo soliciten para la detección y arreglo de fugas de aguas.
La convocatoria de esta línea de ayudas se realizará a través del Departament de Cooperació Municipal, que dirige Miquel Riera, quien ha confirmado a este diario que ésta se hará pública a finales de este mes o principios de noviembre tras alcanzar un acuerdo con el Govern.
El Govern aportará el 75 por ciento del presupuesto global, mientras que el organismo insular asumirá el 25 por ciento restante. Los ayuntamientos colaborarán a partir de ese dinero. Según explica el director insular de Cooperació Local, Domingo Bonnin, la idea es lograr la implicación de las corporaciones de tal forma que las que tengan intención de destinar más a estas obras, más ayudas recibirán.
La tramitación de las ayudas será similar al Pla d'Obres i Serveis, de tal forma que los ayuntamientos se encargarán de las contrataciones de las obras y el Consell se encargará de las revisiones y certificaciones.