MARGALIDA PALMER
Esporles celebró ayer con gran éxito la primera feria de su
historia. El evento congregó a miles de visitantes venidos desde
diferentes puntos de la Isla que en un ambiente de festiva
expectación no quisieron perderse la I Fira Dolça. A partir de las
9 de la mañana y recién inaugurada la Fira, el bullicio circundante
ya era importante, pero a partir de las 11 horas, Esporles se
colapsó. Las retenciones para llegar al pueblo fueron considerables
y todos los espacios habilitados como aparcamiento resultaron del
todo insuficientes, a pesar de que muchos miembros de Protección
Civil y agentes de la Policía Local intentaron regular la situación
lo mejor que pudieron.
Las dos carreteras de acceso al pueblo, la de s'Esglaieta y Establiments, quedaron totalmente colapsadas con retenciones kilométricas. Algunos visitantes tardaron en llegar al pueblo, procedentes de Palma, más de una hora. Esporles, a diferencia de la mayoría de municipios de Mallorca, no contaba con ninguna feria, que es una forma interesante de dar a conocer y, al mismo tiempo, promocionar el municipio.
El nuevo equipo de gobierno PAS-PSM han trabajado duro para organizar un acto de esta envergadura, con la intención de que la Fira Dolça se consolide en el tiempo y no se quede sólo en la primera edición. Los responsables municipales pidieron comprensión, paciencia y, sobre todo, que se les comunique todos los inconvenientes para poder mejorar las próximas ediciones de la Fira.