G. VICENS
El pleno del Ajuntament de Felanitx celebrado el pasado lunes por
la noche, fue tenso y crispado hasta el punto que los grupos de la
oposición abandonaron la sala antes de su finalización.
Una moción presentada por el PP para condenar el transfuguismo, en la que se «insta a todos los partidos políticos de las Illes a cumplir y hacer cumplir el pacto antitransfuguismo firmado a nivel de estado», terminó por crispar los ánimos de una tensa sesión plenaria. La moción hacía constar que «durante la ultima semana de julio, Calvià y Mallorca vivieron episodios que en política se pueden cualificar como deplorables».
El teniente de alcalde, Josep Covas (PP), quiso hacer constar que la oposición se servía «del voto de una tránsfuga», refiriéndose a Montse Pérez, actualmente en el Grupo Mixto tras abandonar el PP. «Con los votos de una tránsfuga queréis cambiar la mayoría del Ajuntament que eligió el pueblo».
Estas palabras y la pregunta de Nicolau Barceló, (EU-EV) a Gabriel Tauler (PP), sobre porqué firmaba la moción cuando hace un año y medio que había abandonado el PP, para luego volver al cabo de unos días, provocó que los grupos de la oposición abandonasen el pleno. Primero fue el PSOE, seguido del PSM, de Montse Pérez, del Grupo Mixto, y de UM. Sólo quedó el equipo de gobierno y Barceló, que debatía con Tauler la moción.
Finalmente, la moción no prosperó, ya que sólo consiguió los ocho votos favorables del PP y el voto en contra de EU-EV, ya que para haberse aprobado se necesitaban nueve votos que conforman la mayoría absoluta.
Pero la tensión ya había empezado antes. El pleno tenía que debatir 19 ordenanzas de tasas e impuestos para el 2006. El delegado de Hacienda, Gabriel Tauler, explicó que «únicamente se actualizan para no quedar desfasados, ya que el IPC interanual es del 3,3%».