El portavoz de la Agrupación Socialista de Calvià y líder de la oposición en el Ajuntament, Antoni Manchado, dio a conocer ayer su punto de vista sobre la crisis política en que vive sumido el Consistorio calvianer, después de que a finales del mes de julio el concejal tránsfuga Joan Thomàs abandonase las filas de Unió Mallorquina (UM) para posicionarse en la órbita del Partido Popular (PP).
En una rueda de prensa convocada en la sede palmesana del PSIB, Manchado anunció que su formación acudirá a la sala de lo contencioso administrativo para impugnar el expediente mediante el que el Ajuntament de Calvià, con el voto tránsfuga de Thomàs, aprobó la recepción de las urbanizaciones que la familia Nigorra posee en Nova Santa Ponça a precio de saldo. El portavoz socialista manifestó que, «aunque es imposible hacer nada contra el acuerdo de pleno y no se puede impedir que se ejecute el acuerdo», la agrupación calvianera mantiene que «el tribunal tiene mucho a decir contra un expediente que está lleno de defectos de forma».
En cuanto al marasmo en el que viven inmersos los firmantes del Pacte per Calvià, Manchado advirtió que «el partido de Nigorra, el PP, utilizará el voto de Thomàs» y acusó a Delgado de haber convertido Calvià en un «vertedero político» adonde va a parar «toda la inmundicia política». «Como los otros no lo hacen, (en referencia a PP)», continuó el edil socialista, «aprovecharé para pedir perdón a todos los calvianers y mallorquines por el espectáculo bochornoso dado por el partido de Nigorra».