«El conjunto de la gestión del PP en el consorcio de fincas públicas se resume en incompetencia para gestionar lo público y voluntad de convertirlo en una maquina de repartir favores». Esta fue la denuncia que ayer hizo EU-EV de Artà sobre la gestión del consorcio de las Fincas Públicas de Artà y de su gerente Bartomeu Palmer. Todo arranca de la polémica publicada estos días de denuncias de particulares sobre «presuntas adjudicaciones a dedo» del refugio de s'Arenalet a cargo del gerente.
El regidor d'EU-EV de Artà, Julen Adrián, acompañado del coordinador general del partido, Miquel Rosselló, manifestó que «no sólo estamos ante un problema de enchufismo y amiguismo sino ante una falta de proyecto propio y de capacidad de ejecutar el plan de inversiones. El producto de todo ello es la parálisis en todos los aspectos». Adrián añadía que «la presunta asociación inexistente encierra un grupo de altos cargos amigos del señor Palmer. Que el gerente hubiera reservado el refugio antes de la abertura del plazo es un detalle escandaloso pero no el más grave de como el PP gestiona las fincas públicas del Consorcio».
Así el edil hizo un repaso a las carencias detectadas en la gestión del consorcio. Por un lado denunció que no hay ningún responsable ni gestor en el área de ganadería y agricultura. «Existe un payes pero en octubre se retira y no se sabe nada de su sustituto. También falta personal en las fincas. La brigada del parque tiene que realizar los trabajos agrícolas».