La oposición hizo valer en el pleno del pasado miércoles su mayoría y logró aprobar una moción presentada «por sorpresa» y por vía de urgencia, mediante la cual fuerzan al equipo de gobierno (PP-es Grup) a un cambio de periodicidad de los plenos. Mientras que hasta ahora estaba aprobado que se haría un único pleno extraordinario cada dos meses, ahora se tendrá que celebrar uno cada mes por exigencia de la oposición.
Fue un pleno que se desarrolló entre reproches por «la no actuación» del equipo de gobierno. Todos los grupos de la oposición (UCAP-UM, PSOE, PSM y EU-EV) lanzaron duras críticas contra la «inoperancia del equipo de gobierno». Incluso algunos pidieron dimisiones, actuaciones en consecuencia o renuncias.
En la moción conjunta de la oposición se expone que «pensamos que hay una parálisis desde el Ajuntament, dejadez y mala gestión por parte del equipo de gobierno. Además, tampoco se hacen comisiones informativas para dar cuenta a la oposición de las decisiones tomadas y de los proyectos a desarrollar. Por todo esto, pensamos que es necesario que los plenos ordinarios se celebren cada mes ya que se agilizarían más los temas».
El teniente de alcalde, Antoni Muntaner (es Grup) criticó que se haya presentado «esta moción por sorpresa» y «las maneras de actuar» de la oposición.