El Ajuntament d'Inca ejecutará entre este año y el que viene una sentencia dictada por el Juzgado de lo Contencioso administrativo número 1 de Palma hace dos años con la que se obliga al Consistorio a pagar 63.722'92 euros, unos diez millones de las antiguas pesetas, más los intereses de indemnización a Catalina Coll. Se trata de una vecina de Inca que sufrió lesiones graves durante julio de 2002 cuando cayó en la calle del nuevo PAC de Inca debido al mal estado del pavimento de la acera junto a un árbol y a la deficiente iluminación de la zona.
Como consecuencia de la caída Catalina Coll tuvo que estar de baja todo un año y sufre todavía secuelas que afectan a la movilidad de un brazo.
El Ajuntament, siguiendo las recomendaciones de los técnicos legales, decidió durante la junta de gobierno celebrada el pasado 8 de julio no recurrir la sentencia ya que en caso de no prosperar tendría que asumir el pago de más intereses que aumentarían la cuantía de la indemnización.
En la junta de gobierno, el Ajuntament informó también que debido a la falta de una partida presupuestaria suficiente para pagar los 63.722 euros se había llegado a un acuerdo para pagar esta cantidad de forma escalonada. Así, este año, la afectada sólo recibirá 24.000 y el resto, 39.722 euros más los intereses que se han acumulado desde 2003, se liquidarán a principios de 2006.
Antecedentes
Aunque el caso de esta mujer es un accidente grave, cabe recordar
que ya hace años que el estado de las aceras y del asfalto de
muchas calles de Inca han provocado numerosas caídas y quejas tanto
de vecinos como de comerciantes y de algunos conductores cuyos
coches se han visto dañados por los múltiples baches que existen en
el asfalto.
Sólo durante el año 2003, el Ajuntament tuvo que pagar 6.500 euros en concepto de indemnizaciones por lesiones derivadas del deficiente mantenimiento de las calles y lugares públicos a diferentes vecinos de Inca. Esta situación ha sido criticada duramente por la oposición que, en muchas ocasiones, ha solicitado más inversiones.