De «nulo» califica el grupo municipal de UM en el Ajuntament de Campos el interés que el primer edil Andreu Prohens (PP) profesa por el maltrecho patrimonio histórico campaner, después de que máximo autoridad política del pueblo haya preferido aprobar la construcción de nuevas infraestructuras culturales y sociales en el polígono industrial de las afueras del pueblo en vez de rehabilitar y aprovechar el patrimonio arquitectónico municipal del centro histórico.
El posicionamiento del comité local de UM en favor de que el equipo de gobierno de Campos apueste por la reforma y adecuación de los edificios históricos del municipio surge después de que Prohens declarase que el Consistorio no puede hacer frente a las obras de rehabilitación de los Banys de Sant Joan, y de que ni siquiera incluyera en la orden del día del último pleno ordinario la propuesta regionalista de trasladar toda la actividad cultural y social acentre vila. Concretamente, UM animaba a Andreu Prohens a que la subvención de casi cuatro millones de euros que la Conselleria de Turisme ha destinado al Ajuntament de Campos para paliar los efectos de la estacionalidad turística, en lugar de destinarse a la construcción del nuevo edificio polivalente en las afueras del casco urbano, se invirtiera en la restauración de la plaza de Can Pere Ignasi, el Convent del Mínims, las Escoles Velles, el Auditòrium, el Convent de les Monges Franciscanes, etc.
UM también apunta que el Consistorio nunca ha redactado un proyecto coherente de restauración de bienes históricos patrimoniales de Campos tales como la Iglesia dels Banys de Sant Joan de la Font Santa o el aljibe de Cas Donat. El secretario general de la Agrupación Socialista de Campos, Mateu Burguera, también se ha hecho eco de la precaria situación en que se encuentran las dos últimas construcciones mentadas instando al conseller de Territori del Consell de Mallorca a salvarlas de la ruina.