El emblemático hostal de Cas Tix, patrimonio histórico vinculado a la que siempre ha sido la principal carretera de la Isla (Palma-Alcúdia), se convirtió ayer en polvo después de que las excavadoras hiciesen efectivas la orden de demolición del edificio, incluido dentro del catálogo municipal que ha sido aprobado inicialmente por el Ajuntament de Campanet.
Al igual que sa Teulera de ca sa Rotera, este edificio ha quedado afectado por la reconversión de esta carretera en autovía entre Inca y sa Pobla. Y es que fue la propia Comissió Insular de Patrimoni, a petición de un informe de la Conselleria d'Obres Públiques, promotora de la vía rápida, quien aprobó la demolición al considerar que era muy peligroso mantener esta edificación a pie de carretera en una curva. Los técnicos sí acordaron conservar los pilares de marés que sostienen el porche del edificio, así como el arco rebajado que daba acceso a la casa, aunque no se decidió el destino final de estos elementos.
Cabe recordar que con anterioridad había sido un propio informe de los técnicos de Patrimonio el que consideraba que el hostal de Cas Tix debía ser conservado por su valor histórico y etnológico. El informe también aconsejaba conservar por las mismas razones sa Teulera de ca sa Rotera, pero cuando se realizó el dictamen este edificio ya había sido demolido al haber comenzado las obras.