La Policía Local de Inca hace un seguimiento de los camiones de recogida de basura en rústico para combrobar si tal y como denunció el miércoles en la comisión de investigación de la basura un ex chofer de la empresa de recogida Cepsa, la empresa ha estado cargando a Inca toneladas de basura de otros municipios. La vigilancia policial concluye el viernes y a partir de esa fecha se realizará un informe exhaustivo sobre el funcionamiento de la recogida de basura en rústico de modo que será sencillo cotejar cifras para saber si mientras ha durado la vigilancia policial ha descendido el número de toneladas de basuras facturadas en la ciudad.
De ser así, habría un indicio más de que se está produciendo un «fraude» contra el Ajuntament, tal y como explicó ayer el teniente de alcalde, Rafel Torres. «Hoy (por ayer) hemos escuchado de nuevo las cintas que contienen la declaración del chófer ante la comisión y entendemos por esas declaraciones que hay un fraude al Ajuntament ya que se estaría cargando a Inca la basura generada en Felanitx y Porreres». Por ese motivo, explica Torres, «independientemente de lo que decida la comisión de investigación como Ajuntament entendemos que la empresa de basuras nos debe una explicación, tenemos que saber si confirma lo que ha declarado el chofer si lo desmiente y si existe una explicación».
La presidenta de la comisión de investigación de la basura, Francisca Vives (PSM) que fue quien denunció inicialmente las presuntas irregularidades confirmó ayer que «antes de tomar una decisión la comisión esperará a tener el informe policial y toda una serie de documentación que tienen que aportar la empresa y el regidor responsable de la recogida de basuras, Joan Rubert». Está previsto que la comisión de investigación de la basura se reuna nuevamente el próximo martes para decidir, si se confirman los hechos, las medidas a tomar contra la empresa de recogida de basuras de Inca, Cespa.