PEDRO AGUILÓ MORA
Él se lo guisa y él se lo come. El alcalde de Campos, regidor de
Urbanismo y diputado del Parlament, el popular Andreu Prohens
Vicens, no sólo practica este ejercicio de creación gastronómica y
deglución simultánea a la hora de ver extraños contubernios donde
sólo hay trabajo periodístico. También lo ha normalizado en los
momentos en que ha tenido que solicitar alguna licencia municipal
de obras al Ajuntament que él mismo preside, donde por cierto,
también ostenta el cargo de regidor de Urbanismo.
Así lo evidencian las ocho licencias municipales de obras con las que el primer edicampaner intenta por todos los medios (más por alguno que por otros) demostrar que no cometió ningún delito contra la ordenación del territorio en las cuatro parcelas rústicas que junto a su esposa posee en la finca de Son Fullana.
En todas estas ocasiones, Andreu Prohens Vicens utilizó el nombre de su esposa, Inés Salom Llompart, para solicitar al regidor de Urbanismo del Ajuntament de Campos (es decir, a sí mismo) poder efectuar varias obras y construcciones en las parcelas rústicas 677, 664, 658 y 42 del polígono número 18 del municipio de Campos. Una zona, según un proyecto que el arquitecto de Prohens remitió al Consell de Mallorca, de carácter no urbanizable destinado al uso agrícola y ganadero.