La convocatoria de la sesión plenaria de los presupuestos de 2003 se formalizó «dentro del plazo legal, puesto que transcurrieron dos días hábiles entre la citada convocatoria y la celebración del polémico pleno». Este extremo fue defendido ayer por el portavoz del equipo de gobierno, Jaume Darder, que basándose en los pertinentes informes jurídicos, desmonta las tesis defendidas por ALM-UM, grupo político en la oposición que denunció que la convocatoria del pleno era «ilegal» puesto que uno de estos dos días hábiles coincidió en sábado y se amparan en que este día, no podían consultar la documentación sobre los presupuestos.
Darder, en nombre del pacto (PP-AIPC), insiste en que precisamente este sábado fue un «día hábil a todos los efectos legales, dado que el secretario firmó un informe diciendo que el citado sábado, por orden del alcalde Antoni Pastor, las puertas del Ajuntament tenían que permanecer abiertas con el objetivo de que todos los grupos políticos tuvieran la oportunidad de consultar los expedientes».
Por su parte, ALM-UM interpuso un recurso ante el juez diciendo que «se había vulnerado su derecho a participar en los asuntos públicos», ya que según la formación, sólo habían tenido un día para consultar la documentación. Posteriormente, el abogado del Ajuntament, Felipe Pou, alegó que el escrito presentado por el grupo de Miquel Riera, presentaba defectos de forma. El juez confirmó los defectos del escrito y dijo que no podía continuar con el juicio.