C. RUIZ DE GALARRETA/MICHELS
Ante el peligro de desprendimientos de piedras de lo alto de la
montaña, el Consell de Mallorca ha iniciado unas obras de
protección de taludes en el enlace de Bendinat, abierto al tráfico
hace tres años. Para la ejecución del enlace fue necesario excavar
en la montaña y precisamente para evitar los desprendimientos se
colocó una malla en la falda de la misma. Sin embargo, los técnicos
de Carreteres han detectado la caída de piedras desde lo alto de la
montaña provocada por las cabras que merodean en lo alto de la
montaña.
Esta circunstancia ha obligado al Consell, según explica Gonzalo Aguiar, jefe del Departament de Carreteres, a tomar medidas ante los problemas que puede generar la caída de piedras a la calzada. La solución adoptada ha sido la colocación de una verja en lo alto de la montaña y encima del túnel. En concreto, según informaron los operarios de las obras se colocarán 200 metros de valla de triple extensión formando una «barrera de embudo», según la definición de los trabajadores de la empresa Stachis SA de Tarragona. La valla tendrá una altura de dos metros. La barrera aguantará durante más de 20 años.
Los trabajos comenzaron la semana pasada y fue necesario trasladar el material con un helicóptero. La colocación de las mallas se prolongará hasta el viernes y, en principio, ayer no se produjeron retenciones, a pesar de que el Departament de Carreteres alertó que se podían producir atascos. Esta actuación costará unos 50.000 euros aproximadamente.