La avería en el motor de un tren de la línea de Manacor, que había partido de Palma a las 16,50 horas provocó ayer un caos considerable en el servicio del ferrocarril durante toda la tarde. El tren con cinco vagones que se dirigía a Manacor se quedó parado en la estación de es Figueral de Marratxí. Más de un centenar de usuarios tuvieron que esperar en torno a hora y media hasta que se habilitaron unos autobuses para transportar a los viajeros a Manacor. Estos autobuses pararon en las estaciones de Inca, Sineu y Petra para recoger a los pasajeros que esperaban el tren y trasladarlos hasta Manacor.
La avería del tren dejó inutilizada una de las vías, de tal forma que el resto de servicios de la tarde se realizó por la otra vía, lo que produjo retrasos en cadena.
Los pasajeros del tren averiado manifestaron su indignación a este diario por la falta de información sobre la duración de la avería. De hecho, según un afectado, transcurrió un tiempo considerable hasta que se decidió habilitar autobuses. Ante la imposibilidad de arreglar el tren en Marratxí, se decidió arrastrarlo hasta los talleres de Son Rullan. Serveis Ferroviarios lamentó las molestias a los usuarios.