M.PUIGRÒS.
Tras el inicio de la expropiación forzosa de la finca Sa Punta de
Son Carrió por parte de la empresa Hijos de Miguel Mascaró S.A,
dicha industria ha trasladado a este periódico que «en ningún
momento nos planteamos expropiar al resto de fincas que forman
parte de la cuadrícula de la concesión minera» que fue dada por el
Govern en 1996.
Fuentes autorizadas de la empresa apuntaron a la alarma social generada por la noticia del derecho de expropiación de Hijos de Miguel Mascaró S.A. para ejercer su actividad sobre las cinco cuadrículas mineras que ocupan una extensión de 150 hectáreas incluyendo una cuarentena de viviendas rústicas, matizando que «su expropiación no es posible porque la ley ampara a los propietarios de las fincas en base al decreto 61/1999 del Plan Sectorial de Canteras vigente».
Por otra parte, desde Hijos de Miguel Mascaró S.A. señalaron que «la piedra caliza que extraemos sólo se encuentra en esta zona de la Isla porque contiene fosfato cálcico». Entre otras utilidades, la piedra que se extrae en Son Carrió se utiliza en campos de golf e incluso para piensos animales.
En cuanto a la expropiación de la finca Sa Punta, la empresa explicó que «durante más de sesenta años hemos explotado la cantera que se encuentra tras las casas y al negociar un nuevo contrato no llegamos a un acuerdo.Les realizamos una oferta mediante carta compulsada y al no obtener respuesta por su parte nos hemos visto obligados a hacer valer nuestro derecho aunque jamás nos planteamos tener que llegar a este extremo por las buenas relaciones que teniamos con ellos».
La empresa minera da trabajo directo a casi veinte familias de la zona, además del resto de empleos indirectos que genera. «Si no pudiésemos realizar la extracción de esta piedra en Son Carrió debería exportarse de la Península y el transporte se encarecería».
Desde Hijos de Miguel Mascaró S.A. señalaron que «tanto Govern como Ajuntament han actuado correctamente en este caso».