La propiedad de es Fangar tiene proyectada una explotación agrícola, ganadera y vinícola en la línea ecológica en su finca de Manacor. De esta forma, lo manifestó ayer a este periódico el representante de la Bonarms SA, la empresa encargada de explotar es Fangar, una de las fincas más grandes de Mallorca con una extensión de 900 hectáreas.
Así las cosas, desde Bonarms SA se explicó que del total de la finca, dos terceras partes están clasificadas como Àreas Naturales de Especial Interés (ANEI), mientras que el resto se destina a zona agrícola y ganadera.
Con vistas a realizar el proyecto de explotación agrícola, la propiedad ha obtenido alrededor de veinte licencias para rehabilitar las casas de es Fangar y otros edificios varios como casitas de aperos, almacenes o pequeñas edificaciones.
La intención de Bonarms SA es que estos anexos o edificios rehabilitados sirvan para albergar a las veinte familias que trabajen el campo y la viña de es Fangar.
Si las cuentas no fallan, se prevé que en los próximos tres años, los primeros productos ecológicos de la finca ya puedan salir al mercado mallorquín con su correspondiente certificado de calidad. Por este motivo Bonarms SA ya ha realizado estudios de la composición química de las tierras y también de la pluviometría.
En cuanto a los vinos de es Fangar, también se producirán en el propio celler que hay en la finca más sin utilizar tratamientos químicos. A pesar de todo, la salida de dichos caldos al mercado se retrasará hasta dentro de cinco años.
La explotación ganadera de la finca se realizará mediante la cría de caballos de raza mallorquina. Además, también se prevé que una piara de cerdos negros habite en los encinares que forman la zona ANEI de es Fangar. Actualmente la finca cuenta con un vedado de caza, a pesar que dicha actividad no se practicará más en es Fangar por orden de Bonarms SA, la licencia del vedado se seguirá manteniendo.