La guardería infantil Toninaina es desde ayer propiedad municipal, después de que el alcalde de Inca, Pere Rotger y su propietaria, Maria Lluc Fluxà firmaran un convenio urbanístico. A través de una permuta, la escoleta, valorada por los técnicos en 630.000 euros, pasa a manos del Ajuntament y a cambio la propiedad recibirá un solar del futuro polígono industrial. En este sentido el alcalde destacó «que una vez el polígono esté en marcha, un tasador ajeno al Ajuntament realizará una valoración de los terrenos necesarios para alcanzar el valor estipulado que se le entregarán a la familia Fluxà». «De esta manera», continuó Rotger, «el Ajuntament no tendrá que endeudarse, ni gastar dinero municipal, porque los terrenos a ceder proceden del 10% del aprovechamiento que le corresponde al Consistorio».
Rotger avanzó además que el próximo paso a dar será la ejecución de una reforma en el centro, aunque no quiso concretar la fecha de inicio de estas mejoras a la espera de los resultados de los técnicos. Dado que junto a la escoleta, el Ajuntament cuenta con un solar municipal de 2000 metros cuadrados, Rotger apuntó «que será todo un reto poner en marcha una edificación nueva, para compatibilizar la escoleta actual». Con la adquisición de la guardería Toninaina el equipo de gobierno descarta totalmente la ubicación de una escuela infantil a nueva en el cuartel General Luque, tal y como se ideó hace dos años destinando estas instalaciones al área de Servicios Sociales.
Los problemas financieros de la Unión Temporal de Empresas a la que se le adjudicaron las obras de acondicionamiento de General Luque (una de las empresas constructoras quebró) han venido retrasando reiteradamente las obras de la nueva escuela infantil de 0 a 3 años por lo que los padres de alumnos y profesores de la escoleta Toninaina propusieron al Ajuntament de Inca que descartara el traslado y en su lugar comprará el actual edificio.