CATERINA VENY/L.P.
Las primeras reacciones en contra de que el Ministerio de Justicia
centralice en Palma las autopsias que hasta ahora se realizaban en
los depósitos de los partidos judiciales de Manacor e Inca no se
han hecho esperar. Los alcaldes de ambas comarcas han empezado a
movilizarse para intentar bloquear el traslado del servicio de
autopsias a Ciutat.
Por su parte, las funerarias de las comarcas afectadas han alertado de las consecuencias negativas que provocará esta nueva centralización. A los familiares de los difuntos a los que se deba practicar la autopsia en Palma a partir del próximo día 1 de febrero, la orden de Justicia les supondrá un mayor coste, en la medida en que las funerarias deban de grabar más los servicios de desplazamiento.
Los alcaldes de Manacor, Antoni Pastor; de Inca, Pere Rotger y Campos, Andreu Prohens, tienen previsto reunirse hoy en el Ajuntament de Manacor para estudiar las medidas dirigidas a «impedir las dificultades que se puedan derivar del traslado de las autopsias a Palma», en palabras del primer edimanacorí. Así mismo, Pastor admitió preocupación por una medida de la que «no se nos ha informado directamente y desconocemos las consecuencias que de ello se puedan derivar».