El equipo de gobierno (PP, UM y SU) del Ajuntament de ses Salines desviará a las obras de reforma de la Església Vella gran parte de la ayuda recibida de la Conselleria de Turisme para la construcción de un parque etnológico.
La Conselleria que dirige Joan Flaquer repartió un total de 88'6 millones de euros en ayudas a los municipios de Balears para proyectos destinados a la desestacionalización turística. El Ajuntament de ses Salines recibió una subvención de 1.207.000 euros para la construcción de un gran parque etnológico en unas zonas verdes de propiedad municipal.
Ahora, sin embargo, el pacto ha solicitado a Flaquer poder desviar casi tres cuartas partes de esta cantidad a las obras en la Església Vella y dejar el resto para la mejora de las citadas zonas verdes. El alcalde de ses Salines, Sebastià Vidal (PP), justificó esta decisión en que «cuando salió esta línea de ayudas (marzo de 2004) la iglesia aún no era propiedad del Ajuntament». «La iglesia está en ruinas y nuestra idea es arreglarla cuanto antes y en ella queremos invertir el máximo posible».
El teniente de alcalde, Antoni Caldentey (UM), manifestó que «es urgente arreglar el techo y los interiores de la iglesia porque están en mal estado». De hecho hace unos meses se tuvo que vallar el edificio a causa de los desprendimientos.