OLGA QUINTANILLA/PEP MATAS
El Ministerio de Medio Ambiente, que dirige la socialista Cristina
Narbona, deberá contestar oralmente en comisión a las preguntas que
formuló Esquerra Republicana en relación a la situación de la
piscina del periodista Pedro J. Ramírez. Las preguntas fueron
registradas ayer en el Congreso de los Diputados, una vez agotado
el plazo para que fueran satisfechas por escrito. ERC considera que
el Gobierno central está dando un «trato de favor» al periodista,
al negarse a proporcionar información sobre los trámites que
afectan a la piscina. Esta queja contrasta con el interés que ha
mostrado la ministra Narbona por la denuncia que presentó el líder
independentista Jaume Sastre, a quien los guardaespaldas de Ramírez
impidieron el pasado mes de agosto transitar por la zona marítimo
terrestre. Fuentes próximas al Ministerio confirmaron que la orden
de garantizar el derecho de paso en toda la Costa de Los Pinos,
donde la familia Ramírez ha disfrutado hasta ahora en exclusiva de
una piscina de uso público, proceden del gabinete de la propia
Narbona. La ministra, en este sentido, ya expresó nada más tomar
posesión de su cargo que una de sus prioridades era, precisamente,
actuar en todo el litoral español conforme a lo que establece la
Ley. La denuncia de Sastre -que Ramírez contestó desde su periódico
asegurando que en la zona había muchos otros casos similares al
suyo- desveló una larga cadena de favores administrativos
concedidos al periodista. Destacan, entre ellos, el pago de unos
100 euros mensuales para el disfrute «exclusivo» de 350 metros
cuadrados de costa; la utilización de una concesión administrativa
a nombre de terceros; la no publicación en el BOE de la Orden
Ministerial; la prescripción de una multa de 3.000.000 millones de
pesetas por una infracción urbanística, y la sorprendente
inscripción en el registro de la propiedad de la piscina, a pesar
de estar situada en dominio público marítimo-terrestre.
A pesar de que Jaume Sastre presentó su denuncia el pasado mes de agosto, aún no ha recibido ninguna contestación de la Demarcación de Costas.
Fuentes del Ministerio, asimismo, han señalado que Pedro J. Ramírez y su compañera sentimental, Àgatha Ruiz de la Prada, ya habrían sido informados de manera extraoficial de que resulta imposible regularizar «su» piscina sin respetar el derecho de paso. Otras fuentes apuntan a que Ramírez y de la Prada han solicitado a unos agentes que les encuentren una casa en la misma Costa de los Pinos que sea «segura» y no tenga ningún problema de carácter urbanístico, extremo éste que no podido ser confirmado.