ENRIC ELOSÚA
El presidente de la Mancomunitat del Pla Tomás Campaner y el
director de s'Institut de Serveis Socials Antoni Serra, ofrecieron
ayer una rueda de prensa para comunicar el acuerdo alcanzado para
garantizar la atención social de los usuarios de los distintos
municipios que conforman la Mancomunitat, que en estos momentos
pasa por una grave crisis económica. Ante la solicitud de ayuda por
parte de la Mancomunitat y para garantizar este servicio,
s'Institut ofrece a cada uno de estos municipios un convenio marco,
siguiendo el mismo procedimiento empleado con el resto de
ayuntamientos de Mallorca. Esta propuesta «requiere la cooperación
y corresponsabilidad de los ayuntamientos implicados», indicó
Antoni Serra.
Los técnicos de s'Institut, en colaboración con los técnicos de la Mancomunitat, estudiarán los detalles de la Gestión de Servicios Sociales que se está realizando, para elaborar una propuesta de actuación para cada municipio. El resultado de esta tarea será expuesto en el pleno de la Mancomunitat y a cada ayuntamiento.
Tomàs Campaner explicó que anteayer tuvo lugar la primera reunión en pleno de la Mancomunitat para tratar el presupuesto de 2005, «donde se analizaron los servicios para tratar de conseguir un coste mínimo y un máximo servicio». «La Mancomunitat es necesaria para mantener y gestionar determinados servicios por lo que no se puede plantear su disolución, este ofrecimiento recibido por parte de s'Institut ayudará a reforzarla», dijo Campaner y aprovechó para agradecer a s'Institut «su buena predisposición y compromiso para buscar soluciones».