JULIÀN AGUIRRE
El Ajuntament de Santa Maria del Camí celebró ayer la entrega de
las insignias «Brot de Pi» con motivo de la II Festa del Vi Novell,
reuniendo a los diferentes cellers i bodeguers del pueblo, además
de a los dos protagonistas y homenajeados. Sebastià Pastor Batle,
de Can Vinagre, y Pere A. Serra, presidente del Grup Serra,
recibieron la distinción de plata de manos de la alcaldesa, Rosa
Vich. Un emocionado Sebastià Pastor agradeció el reconocimiento que
el pueblo le realiza por ser el payés vinatero en activo con más
años de experiencia en el pueblo de Santa Maria, al frente de los
cellers más prestigiosos.
El galardón a Pere A. Serra se debe a la difusión que, a través de sus numerosos medios informativos, ha hecho y sigue realizando en torno al mundo del vino, conservando y promocionando dicha tradición. Además, como señaló la propia Rosa Vich, «es uno de los más fervientes defensores del vino de Mallorca y mantiene relación con la tierra de Santa Maria». Ambos homenajeados se refirieron a la necesidad de conservar lo nostro.
La sala de plenos se llenó de vecinos que contemplaron un emotivo y entrañable acto, entre los que se encontraban Antonia Juan Garau, deceller Es Cavallers; Antoni Ramis, de la bodega Ramanyà; Pere Calafat, de Jaume de Puntiró; Sebastià Pastor, de Vins Pastor; Bartolomé Rubí, de Can Rubí y Ramón Servalls, de Macià Batle, además de Ramón Más, Mateu Morro y Àngela Candel, ediles.