J.R.
El PSOE de Calvià ha calificado de «segundo pelotazo urbanístico
del PP con la familia Nigorra, en menos de dos meses, la intención
de recepcionar las urbanizaciones de Santa Ponça». Así se han
expresado los socialistas del municipio tras las declaraciones
efectuadas por el teniente de alcalde de Urbanismo (PP), Alberto
León, donde expresaba la voluntad del Ajuntament de acercar
posturas con la promotora Habitat Golf, propiedad de la Familia
Nigorra, para poder recepcionar las urbanizaciones. Según el PSOE,
«sería un escándalo que el Ajuntament recepcionará la urbanización
en las pésimas condiciones en las que se encuentra y de cuyas
deficiencias debería haberse hecho cargo Habitat Golf hace años y
que ahora pretende que paguen los ciudadanos».
Los socialistas explican que en 1991 se intentó llegar a un acuerdo con la urbanizadora pero «no hubo acuerdo, la familia Nigorra se desentendió y dejó que la zona se fuera degradando, hasta llegar a la situación de abandono actual», y añaden que «en 2001 el Gobierno socialista adelantó un millón y medio de euros para alumbrado». Antoni Manchado opina que «la propuesta de la familia Nigorra de que le recepcionen las urbanizaciones, haciéndose cargo el Ajuntament de los desperfectos y recalificándole tres parcelas hoteleras, es un despropósito sin precedentes que beneficiaría al amigo del Alcalde y perjudicaría a los ciudadanos».
Por su parte, UM manifestó ayer que tiene «la firme voluntad de recepcionar la urbanización de Nova Santa Ponça, y el departamento de Mantenimiento evalúa el coste de las diferentes deficiencias, ya que no queremos hipotecar el futuro del municipio y del Ajuntament a causa de una deficiente recepción». UM recuerda que «el PP a menudo olvida que no tiene mayoría absoluta y que el Pacte per Calvià son dos partidos». Finalmente apuntan que las declaraciones de Alberto León en las que desautorizaba los informes de Mantenimiento «son intolerables e impresentables, ya que no es quién para desautorizar a Joan Thomàs, sólo tienen un afán de protagonismo y que han sido malintencionadas para crear malestar en el Pacte y no favorece la negociación para una posible recepción de la urbanización». Por otra parte, el alcalde de Calvià, Carlos Delgado, se reunió ayer con el presidente de la asociación de vecinos de la urbanización Nova Santa Ponça, José Miguel Fabregat, para conocer los inconvenientes que padecen los ciudadanos de la zona «derivados de la no recepción de la urbanización por parte del Ajuntament, situación generada en 1991», según anunció el Ajuntament de Calvià en un comunicado.