Las linternas de melón de los más pequeños marcaron ayer el inicio de las Festes del Meló de Vilafranca. Tras el pasacalles donde los más jóvenes mostraron orgullosos sus creaciones con el fruto más típico de la localidad se abrió la feria nocturna a modo de previa a todo lo que podrá verse hoy a partir de las primeras horas de la mañana.
El pasado año, el Ajuntament de la localidad organizó un taller de linternas de melón, aunque este año el Consistorio ha creído más conveniente seguir con la tradición en que cada chaval realiza la linterna en su casa y con la ayuda de los mayores. Así, hacia las ocho de la tarde las primeras camisetas blancas con pañuelo verde empezaron a llegar a la plaza Major portando su correspondiente linterna de melón.
Acto seguido, a las ocho y media de la tarde, centenares de vecinos disfrutaron de una multitudinaria cena que un año más se celebró en la carretera. La lechona y etrampó fueron un excelente reclamo.
Aún así, los actos estrella se centrarán durante la mañana de hoy, en que se celebrará el concurso de melones en que gana el que pesa más.