En el transcurso de este verano se han producido varios actos vandálicos en las explotaciones de melones de Vilafranca. El último episodio se produjo hace unos días cuando un payés de la localidad, cuya explotación de encuentra en es Pou Morer, se percató de que todas las hileras de melones, que albergaban unos 100 ejemplares, habían sido arrancadas y sus melones acuchillados varias veces.
Precisamente Vilafranca se dispone a celebrar este fin de semana la Fira i Festa del Meló y sorprende que los actos vandálicos se produzcan en las fincas agrícolas de la localidad. Con dicha explotación, ya son cinco las fincas que ha padecido ataques de diversa consideración. Los hechos, no han sido en ningún caso denunciados ante el cuartel de la Guardia Civil de Vilafranca.
Los primeros casos de vandalismo ocurrieron en las explotaciones de Son Pou, Alanzell y sa Moleta y han sido muy variados. Se han producido desde destrozos a plásticos de invernadero que se utilizan para salvaguardar las meloneres en época invernal hasta los típicos robos de melones en los meses de verano. Hay payeses que han padecido el corte de raíz principal de la planta como el último caso de la explotación de es Pou Morer. Es Pou Morer es una zona rural ubicada al suroeste de la localidad. Esta finca ha sido el escenario de los últimos hechos vandálicos.El propietario de esta explotación ha padecido hasta tres ataques diferentes desde la siembra de la semillas de melón. El primer acto que sufrió fue el destrozo de parte de los plásticos de invernadero que se utilizan en los primeros meses de desarrollo del producto agrícola. Posteriormente, fueron cortadas las raíces principales de las meloneres ocasionando graves desperfectos en el crecimiento natural de los ejemplares. Así, más de un centenar de melones crecieron deformemente.