T.GOMIS
Demarcación de Costas de las Baleares no tiene constancia de que la
orden ministerial que legalizó en enero de 2001 la piscina situada
delante de la casa del periodista Pedro J. Ramírez y de su pareja,
la diseñadora Àgatha Ruiz de la Prada, haya sido publicada en el
Boletín Oficial del Estado (BOE), como es preceptivo al tratarse de
un dominio público. Este periódico tampoco ha podido localizarla en
el BOE. Esta circunstancia sitúa la piscina, la concesión y todo el
procedimiento que los envuelve, en una situación de muy
atípicos.
Los expertos en derecho administrativo consultados por este diario coinciden en señalar que la orden del Ministerio de Medio Ambiente, dirigido entonces por Jaume Matas, es «válida» y legaliza la instalación que usa hoy la familia Ramírez. Sin embargo, la no publicación que exige el artículo 146.12 del Reglamento de Costas resta «eficacia» a la norma.
¿Por qué razón la Dirección General de Costas no ha publicado en tres años la orden ministerial que convierte en «general, pública y gratuita» la piscina? Los expertos sólo pudieron hacer suposiciones, que van desde la ignorancia del procedimiento al extravío del texto hasta el trato de favor. Para aclarar este punto, resaltan, será muy importante conocer el expediente completo de la concesión y de las obras que se permitieron con ella. Es de especial importancia saber si han pasado final de obra y, en concreto, si lo construido se adecúa al proyecto suscrito por el ingeniero Juan José Lemn. Aclarar todos estos puntos corresponderá al Gobierno español, que será requerido para ello en el Congreso de los Diputados por Esquerra Republicana, si es que antes no lo ha hecho la propia Dirección General de Costas.