La Asociación de Vecinos de Ruberts ha presentado un recurso sobre el fallo de una sentencia del Juzgado de lo contencioso administrativo número uno de Palma que en primera instancia declaró el pasado mes de julio nulas las licencias de tres adosados construidos en el «llogaret» de Ruberts.
Los vecinos solicitan que «una vez que se ha demostrado la ilegalidad, pedimos que se actúe en consecuencia y se demolan las construcciones para restablecer la legalidad». La asociación ya solicitó en 2003 una aclaración de sentencia, en la que pedía su demolición, sin embargo, explica Gabriel Torrens, vecino de Ruberts, «la juez resolvió en diciembre y aunque no autorizó la demolición, volvió a declarar nulas las licencias».
Torrens ha querido aclarar que «nosotros no estamos en contra de que se construya, pero dentro de la ley y manteniendo el criterio de construcción con el entorno rural». «Contamos además con el aval del Consell de Mallorca», explica Torrens, «ya que la aprobación inicial del Plan Territorial de Mallorca, Ruberts aparece como Bien de Interés Cultural (BIC)».