Las playas del municipio tienen desde hace unos días hamacas y sombrillas sobre la arena a pesar de que el Ajuntament todavía no ha adjudicado la gestión de este servicio. La asociación de vecinos del Port de Pollença, antigua concesionaria de las playas, presta el servicio temporalmente de manera gratuita y hasta que se adjudique la concesión de forma definitiva, algo que no ocurrirá hasta primeros de junio.
Precisamente el Ajuntament de Pollença rechazó ayer en pleno las alegaciones presentadas por un vecino al pliego de condiciones por el que se rige el concurso de las playas, de modo que se abre un nuevo plazo de diez días para que las empresas interesadas en gestionar las playas del municipio presenten sus plicas, que se abrirán probablemente el 1 de junio.
A pesar de la convocatoria del concurso, no está sin embargo garantizado que la adjudicación vaya a parar a la mejor oferta, ya que según indicó el alcalde Joan Cerdà (UM) al pleno, el Ajuntament ha recibido una sentencia del Tribunal Supremo de la que se desprende que la gestión de las playas del municipio no es un servicio público, sino una subcontrata y que por tanto no debe regirse por las mismas normas de contratación.