El Ajuntament de Campos aprobó ayer con los votos favorables de los grupos de la oposición, PSM y UM -Convergència Campanera estuvo ausente-, sacar a subasta pública la concesión de dos de los chiringuitos (quioscos-bar) y la explotación de las hamacas y sombrillas del arenal desde las playas de sa Ràpita a ses Covetes. Esta vez, el Consistorio campaner, que dará la explotación temporal de la concesión por un plazo de 12 años, ha optado por un sistema de subasta pública para evitar la polémica generada hace 14 años cuando el Ajuntament dio la concesión por concurso-subasta a un grupo de empresarios liderados por el industrial Piris. La concesión terminó en los juzgados con una querella del resto de participantes.
Ahora, al pujador que presente la mejor oferta económica se le adjudicará la concesión que parte de un precio mínimo de 40.000 euros anuales. Además, en el pliego de condiciones se incluye que sea el propio Ajuntament el que controle las labores de vigilancia de los dos socorristas que estarán en cada playa. El pliego fue ayer puntualmente modificado a petición del PSM, que rechazó el hecho que los socorristeis estuvieran bajo la tutela del explotador del chiringuito.
El portavoz nacionalista, Juan Juan, sugirió que los gastos de los socorristeis fueran compartidos por la empresa explotadora y por el Adjuntament, una medida que fue aceptada por el primer edil y gozó del consenso de todos los miembros del pleno. Anteriormente, era el mismo chiringuito de la playa el que se ocupaba de poner una determinada bandera según el estado del mar.