El centro de día de Santanyí, construido en la antigua residencia de s'Alqueria Blanca, se ha convertido en un punto de gran demanda por parte de personas mayores que residen en otros núcleos o poblaciones diferentes de Santanyí. Por este motivo, el Ajuntament se ha visto obligado a modificar el reglamento del centro de día, en el cual, sólo estaba permitida la entrada a los residentes del municipio. Ahora, con la modificación las personas mayores que están empadronadas en otros municipios tendrán acceso a los servicios que se prestan en el centro de día. La delegada d'Acció Social en el Ajuntament de Santanyí, Maria Pons (PP), ha explicado que «hay gente de Cala Ferrera, Portocolom, Cas Concos, Colònia de Sant Jordi y ses Salines, que estaba interesada en venir al centro de día y no podía porque no era residente, pero ahora ya podrán disfrutar de estos servicios».
El centro de día tiene una cabida máxima de 30 personas, hace un año que está abierto y en este momento, «tenemos siete usuarios». La regidora popular comentó que «la gente del municipio todavía no está acostumbrada a llevar a sus mayores a un centro de estas características porque se tiene la idea de que en casa se está mejor. No obstante, esto no es del todo cierto, puesto que en el centro, los mayores están muy bien atendidos por profesionales que les organizan actividades, hacen talleres de manualidades, conversaciones de grupo, preparación física por un terapeuta, pueden leer la prensa, entre otras cosas. Además este año, hemos renovado el convenio que tenemos con la Cruz Roja, que es el organismo que explota el centro de día» apuntó Pont.
La regidora ha puntualizado que «las personas de Santanyí pagan menos que los que vienen de fuera, esto es porque los residentes ayudan con sus impuestos al municipio, mientras que los otros no». El nuevo reglamento se aprobó en el pleno de diciembre y entrará en vigor este mes.