El Ajuntament de Sant Llorenç ha modificado las Normas Subsidiarias con el objetivo de evitar una avalancha de construcción de viviendas plurifamiliares adosadas. El alcalde de la localidad, Mateu Puigròs (GISC), explica que la luz de alarma se encendió cuando «detectamos que había expectativas por parte de unos promotores de construir 18 adosados en Son Carrió, esto nos preocupó y por este motivo cambiamos la normativa».
A petición del Ajuntament, la Comissió Insular d'Urbanisme, Ordenació del Territori i Patrimoni aprobó la modificación puntual de la normativa que reduce el techo poblacional de los núcleos de Sant Llorenç y Son Carrió que pasa de 30.000 a 14.025 habitantes. Para ello, se han aumentado los metros cuadrados necesarios para la construcción de una vivienda y limitado las alturas de cada una.
Así, en Son Carrió se podrá construir una vivienda por cada 200 metros cuadrados de solar con planta baja y primer piso. En Sant Llorenç, por otro lado, la superficie mínima de construcción se ha establecido en los 100 metros cuadros por vivienda que podrá tener planta baja, primer y segundo piso. En este sentido, Puigròs indica que las construcciones pueden tener en la planta baja otro uso que no sea vivienda.