El Institut Balear de Sanetjament (Ibasan), organismo dependiente de la Conselleria de Medi Ambient del Govern balear, ya está preparando una nueva ampliación de la depuradora de Pollença cuando apenas faltan unas semanas para que comiencen las últimas obras de ampliación de la planta, que fueron aprobadas durante la pasada legislatura.
El alcalde de Pollença, Joan Cerdà (UM), explicó ayer que «parece que la ampliación de la depuradora que se había previsto sólo basta para cubrir la demanda actual, pero en dos o tres años cuando se sumen las urbanizaciones de la Font y el Vilar y con el desarrollo de la zona denominada UP-1, las instalaciones quedarían pequeñas». Por ese motivo, explica Cerdà, «el Ibasan nos propone ahora que les cedamos unos terrenos para llevar a cabo una segunda ampliación cuyo proyecto se redactaría mientras se realizan las obras de la primera ampliación, ya adjudicadas y que tienen que estar a punto de comenzar».
El alcalde Cerdà opina que «esta segunda ampliación dará tranquilidad de aquí a 8, 9 o 10 años; además la población ya no crecerá tanto». Así las cosas, el Ajuntament busca ahora una finca rústica colindante con la depuradora y ha convocado un concurso restringido cuyas bases se aprobarán en el próximo pleno, en las que oferta un máximo de 210.000 euros (35 millones de pesetas) al propietario que esté dispuesto a vender.