La capacidad de inversión en nuevos proyectos de infraestructura por parte del Ajuntament de Manacor es «totalmente insuficiente». La precaria situació económica ha sido admitida por el propio alcalde, Antoni Pastor, que en estos momentos concentra todos los esfuerzos en conseguir fórmulas y vías de financiación externa para aumentar esta capacidad de inversión, pero también para terminar con la deuda municipal y las de los contribuyentes morosos, que asciende a 6,4 millones de euros. Para acabar con esta situación, el Govern balear podría asumir directamente la recaudación de la deuda de todos los tributos pendientes de cobro.
Esta fue una petición lanzada por el alcalde Pastor al conseller d'Economia i Hisenda, Lluís Ramis, durante su visita de ayer a Manacor. Esta solución podría liberar al Ajuntament del cobro de los 6,7 millones de euros en recibos, correspondientes a los tributos pendientes de cobro, sobre todo por lo que se refiere a Impuestos Sobre Bienes Immuebles.Precisamente una de las causas que limita la capacidad de inversiones por parte del Ajuntament es el gran número de morosos que no pagan sus impuestos municipales. Unos tributos impagados que ahora la Conselleria d'Economia podría pasar a cobrar directamente.