E.BALLESTERO/M.PUIGRÒS
Guillem Ferriol, único concejal de UM en Maria de la Salut, es
desde ayer el nuevo alcalde del municipio después de que prosperara
la moción de censura presentada contra el hasta entonces batle
Martí Ferriol (PSOE) con los votos a favor de UM, PP y Jaume Mestre
(antes cabeza de lista del PSM como independiente y ahora en el
grupo mixto) y en contra de socialistas y nacionalistas.
Concluye así la Alcaldía más breve de la historia de Maria sin que el socialista Martí Ferriol haya tenido si quiera la posibilidad de mostrar su talante de gobierno.
Así lo reconocieron ayer los líderes de todos los grupos políticos con representación municipal que no dudaron en sus intervenciones en explicar que «este no es un acto para censurar la actitud del alcalde sino para dar a Maria de la Salut el gobierno estable que necesita», dijo el nuevo alcalde Guillem Ferriol (UM).
Y es que tanto PP como UM y Jaume Mestre justifican la moción de censura en el hecho de que desde que el pasado 14 de junio fuera elegido alcalde en minoría Martí Ferriol (PSOE) con los únicos votos de sus tres regidores, no ha podido cerrar un pacto postelectoral que le asegure una mayoría estable.
La salida del PSM del ex alcalde Jaume Mestre y su paso al Grupo Mixto posibilitó el 13 de julio esta nueva formación de gobierno con tres regidores del PP, uno de UM y uno del grupo mixto.
Guillem Ferriol será alcalde el primer año y medio de la legislatura, después le sustituirá Antoni Mulet (PP). El ex alcalde Jaume Mestre será el coordinador de áreas de gobierno y delegado del consorcio de aguas. PSOE y PSM permanecerán en la oposición con tres y un regidor respectivamente.
Jaume Mestre, que fue acusado de transfugismo por unos (PSOE y PSM) y que contó con la complicidad de UM y PP, renunció a intervenir en el transcurso del pleno celebrado ayer. Sí intervino el alcalde saliente Martí Ferriol: «Lo normal es que se presente una moción de censura cuando hay unas actuaciones censurables... Para vosotros es censurable que hallamos tenido el coraje y la valentía de querer llevar adelante un proyecto social en el que creemos y no queréis escuchar otros hechos censurables como son dar licencias de obra sin informe técnico o favorecer a unos pocos en contra del interés general».
El alcalde saliente concluyó su discurso diciendo: «Prefiero pasar a la historia política como alcalde breve que no como un alcalde de izquierdas que gobierna para la derecha».
La portavoz del PSM tras la dimisión de Mestre, Catalina Inés, tampoco escatimó en críticas: «Lamentamos y condenamos que PP y UM hayan pactado con un tránsfuga dando ejemplo de la poca legitimidad democrática; es una vergüenza para Maria».
El pleno batió récords de asistencia. En la sala estaban presentes además de multitud de vecinos numerosos líderes políticos. Francesc Antich, Francina Armengol, Celestí Alomar y Francesc Quetglas, entre otros, apoyaron con su presencia a Martí Ferriol y abandonaron la sala durante el discurso del alcalde entrante. Apoyando a los populares estaban Pere Rotger y José María Rodríguez, entre otros. Dolça Mulet y Damià Nicolau acudieron en representación de UM y Mateu Morro, para apoyar a sus regidores del PSM.