En estos momentos, el Ajuntament de Manacor gobernado por el PP tiene sobre la mesa un dilema muy controvertido, pues tiene que invertir más dinero que el previsto en el presupuesto inicial para conservar la fachada principal de la antigua Cambra Agrària o, por contra, derribarla directamente y levantar el edificio de nuevo. El dilema es aún más serio para el Ajuntament ya que el inmueble de la cámara agraria pertenece al catálogo de patrimonio industrial elaborado por el Consell de Mallorca a finales de la pasada legislatura y que fue entregado al anterior equipo de gobierno para que fuese incluido en el planeamiento urbanístico. El catálogo es posterior al proyecto de la escuela.
En el caso de que el gobierno local decida mantener la fachada actual se verá obligado a realizar una serie de actuaciones para asegurar la estabilidad de la fachada, ya que el antiguo edificio no tenía cimientos. Estas intervenciones disparan el coste de las obras y, de esta manera, el gasto para el Ajuntament sería de 120.200 euros más.
La paralización de las obras de la Cambra Agrària, fue confirmada por la delegada de Cultura, Maria Antònia Mercant, quien explicó: «En estos momentos estudiamos las opciones. Por una parte, si merece la pena asumir un coste tan elevado cuando sólo quedan elementos parciales, como por ejemplo la fachada, ya que el resto del edificio está derribado, o, por otro lado, si derribamos todo el inmueble y lo construimos de nuevo».