M.PUIGRÓS/M.NADAL
El Ajuntament de Santa Margalida desestimó ayer en sesión plenaria
extraordinaria las alegaciones presentadas por el PSOE en contra de
la aprobación inicial de los presupuestos municipales aprobados
durante el mes de marzo por el equipo de gobierno por mayoría
simple con la ausencia de la oposición. El representante del PSOE,
Miquel Cifre, recordó ayer las alegaciones en contra de los
presupuestos aprobados, alegando que es necesaria «una revisión de
los presupuestos». Asimismo, Miquel Cifre, criticó el gasto
desmesurado del Ajuntament y considera que «los ingresos deben ser
más conservadores para neutralizar tanto gasto». Además, Cifre
alegó que una parte del presupuesto de 2003 debería destinarse a
una reducción de la deuda bancaria.
El edil socialista continuó diciendo que «se deberían introducir en los presupuestos municipales varias partidas presupuestarias aprobadas en plenos de la pasada legislatura». Cifre se refería a la instalación de contadores de agua potable y sus conexiones en la red municipal de Son Serra, la red de saneamiento de aguas residuales de Can Picafort o la construcción de la escuela de Son Serra con una dotación de 170.000 euros, además de una dotación de 60.000 euros destinada a la restauración, consolidación y difusión del yacimiento arqueológico de Son Real.
Cifre, además, dejó claro que «en nuestro grupo político hemos encontrado algunas faltas de partidas presupuestarias que creemos importantes destinadas a la normalización lingüística, a un plan de prevención contra la droga, contra la violencia de género o para hacer frente a la sentencia en contra del Ajuntament respecto al tema de la arena de Son Real que asciende a 42.000 euros». Las alegaciones del PSOE fueron desestimadas por mayoría absoluta con los votos de PP-CPU.