CARMEN RUIZ DE GALARRETA/EFE
Los alcaldes reivindicaron ayer más presencia de la Guardia Civil
en la Part Forana de Mallorca al delegado del Gobierno, Miquel
Ramis, quien, en tres turnos, se reunió durante toda la mañana con
los representantes de las administraciones locales de las comarcas
de Inca, Manacor y Palma. 'La seguridad ciudadana, sin duda, es el
tema que más preocupa a los alcaldes de la Isla', subrayó Ramis. El
delegado de Gobierno, que se comprometió a atender las demandas
municipales, se mostró partidario de la colaboración entre las
fuerzas policiales -Guardia Civil, Policía Nacional y policías
locales-. Muchos alcaldes hicieron alusión a la falta de medios y
personal para hacer frente a la inseguridad y plantearon la
posibilidad de mancomunar la policía. Ramis se mostró «abierto» a
que determinados municipios, sobre todo pequeños, creen juntas
locales de seguridad para que sus policías municipales colaboren y
formen la policía mancomunada.
Los representantes de la comarca de es Raiguer plantearon esta solución. Miquel Deià, alcalde de Alaró, expuso el problema al que se enfrentan los municipios pequeños: «Una propuesta es ayudarnos puntualmente y otra mancomunar la policía, una iniciativa que podría ir bien». Joan Rotger, alcalde de Selva, hizo más incidencia en la necesidad de «optimizar los recursos de la Guardia Civil y coordinarlos con los de la Policía Local». El alcalde de Alcúdia, Miquel Ferrer, fue muy crítico y reivindicó más inversiones en materia de seguridad en los municipios costeros «que son una fuente de recursos muy importantes para el Estado». «Una población con 70.000 ó 80.000 habitantes en verano es caldo de cultivo para la delincuencia, igual que en invierno cuando se quedan vacíos los bienes inmuebles», apuntó Ferrer, quien exigió un cuartel de la Guardia Civil permanente. El alcalde de Alcúdia se mostró partidario de mancomunar los cuerpos de seguridad, aunque destacó que lo «esencial es que cada uno asuma su competencia».
Los municipios de es Pla y Llevant de Mallorca expusieron que tienen dificultades para cubrir las plazas de policías locales. En este sentido Mateu Puigros, alcalde de Sant Llorenç, indicó que la diferencia de complementos específicos fomenta esta dispersión de los agentes». También se hizo hincapié en fomentar la especialización con cursos de formación de los efectivos para las zonas turísticas. De la comarca de Palma, el alcalde de Calvià, Carlos Delgado, apostó por mejorar la seguridad en esta localidad paliando el «déficit» de agentes de la Policía Local, incrementando los recursos de la Guardia Civil y creando una comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. Lluc Tomás, alcalde de Llucmajor, abogó por mejorar la coordinación entre los diferentes cuerpos.