Objetivo cumplido y éxito por partida doble: Cuarta mayoría absoluta para el PP y primera mujer que gobernará Palma.
Catalina Cirer entró ayer en la historia al convertirse en la primera alcaldesa de Palma tras la rotunda victoria del Partido Popular (PP) en las elecciones municipales del pasado día 25 y recoger el testigo que le deja Joan Fageda, alcalde durante los últimos doce años.
Además de conseguir la cuarta mayoría absoluta para el Partido Popular, la victoria de Catalina Cirer es la victoria de una generación que se incorporó a la vida política a principios de los noventa y que representa unos valores personales muy definidos, -combinación de sencillez y populismo- que conectan con la base del electorado de los conservadores.
Sus primeras palabras fueron para dejar claro el valor que concede a la familia, a la que aludió en varias ocasiones a lo largo de su intervención.
En su discurso de toma de posesión como alcaldesa, Catalina Cirer, se comprometió a «trabajar sin descanso» para hacer realidad todos los proyectos que la Corporación tiene previsto poner en marcha en los próximos cuatro años y asumió su primer compromiso: ser «la alcaldesa de todos». Para ello, ofreció «diálogo y cooperación» al resto de grupos.