MIQUEL BAUÇA
El enorme esfuerzo realizado por Unió Mallorquina durante los
últimos meses para poder presentar una candidatura en todos los
municipios de Mallorca ha dado sus resultados, pues en relación a
los comicios de 1999, los nacionalistas de Maria Antònia Munar han
conseguido recolectar 35 concejales más. Todo un éxito que lleva a
UM a ser el tercer partido de la Isla, por delante del PSM.
El avance de UM ha sido espectacular en Porreres, donde Joan Sastre volverá a ser alcalde después de haber doblado los cuatro ediles de hace cuatro años, y en sa Pobla, donde Joan Comas también ha doblado su representación, de tres a seis, aunque permanecerá otros cuatro años en la oposición. La política de coaliciones preelectorales desarrollada por UM ha dado su fruto. En 1999, UM fracasó en Manacor, pero fichó al alcalde, Miquel Riera (ALM), y ahora ha obtenido siete ediles. En Santanyí tampoco tenía representación y tras la boda con CMS de Cosme Adrover ha logrado dos regidores. En Pollença, el pacto con UNPI ha posibilitado que la lista encabezada por Joan Cerdà pase a tener cinco representantes en lugar de dos y con serias opciones a levantar la vara de mando dentro de dos semanas.
Además de por la vía coalicional, UM ha entrado en ayuntamientos hasta ahora esquivos, al menos en los últimos tiempos: Alaró, Banyalbufar, Bunyola, Consell, Escorca, Esporles, Fornalutx, Inca, Mancor, Maria, Son Servera o Vilafranca. El PSOE también realizó un gran esfuerzo por estar presente en todos los comicios locales y esa aceleración le ha dado buenos resultados en forma de casi una quincena más de concejales que en 1999.