El president del Govern de les Illes Balears, Francesc Antich; la alcaldesa de Calvià, Margarita Nájera, y el conseller de Turisme, Celestí Alomar, visitaron ayer las obras de embellecimiento realizadas en el solar de Cas Català donde hasta principios de este año se levantaba el hotel Ditos, en primerísima línea de mar. Este edificio hotelero obsoleto fue dado de baja en 1993 y reconvertido en apartamentos privados hasta que la Administración autonómica acordó su adquisición, en noviembre de 2002, con dinero procedente de la recaudación de la ecotasa para demolerlo y habilitar una zona verde.
El inmueble fue demolido a principios de 2003 y los trabajos realizados desde entonces han consistido en retirar los escombros, consolidar el terreno con el fin de evitar desprendimientos y dar seguridad a los bañistas de la pequeña playa de Cas Català. En esta primera fase también se ha habilitado una escalera para acceder hasta la playa desde la carretera Palma-Port d'Andratx, un pequeño jardín y un mirador desde la calle que es un auténtico balcón sobre el mar.
En la segunda fase, cuyas obras serán ejecutadas tras el próximo verano, se procederá a la instalación de un ascensor para personas con minusvalías y la dotación de servicios para los usuarios de la playa. El viejo hotel Ditos, ubicado sobre un solar de 234 m, tenía 20 plazas turísticas y fue adquirido por el Govern por 1,3 millones de euros. La superficie construida de este inmueble era de 454 metros cuadrados.