El propietario de la finca de Can Guilló de Pollença, en la que se ha detectado un golf ilegal, ha pedido permiso al Ajuntament para rehabilitar las casas de la possessió y transformarlas en un agroturismo.
El PSM pidió a sus socios de gobierno en el Ajuntament de Pollença (PSOE y UM) que retiraran de la comisión de gobierno la propuesta para tramitar el interés general que requiere esta obra y conceder licencia para realizar la reforma, según confirmó el regidor Antoni Marquet (PSM). La propuesta quedó finalmente sobre la mesa para un mayor estudio, aunque cuenta con informes técnicos y jurídicos favorables, según informó el regidor de Urbanismo, Joan Cerdà (UM).
La reforma de las casas de Can Guilló para transformarlas en un hotel rural con siete habitaciones está amparada por la ley, según explicó el regidor de Urbanismo, Joan Cerdà (UM). El regidor de Medio Ambiente, Gabriel Cerdà (PSM), denuncia, no obstante, que «autorizar la reforma supondría aceptar una política de hechos consumados porque el propietario no necesitaría legalizar el golf como para que funcionara como club, tendría un hotel privilegiado con un campo de golf privado». Por ese motivo, explica Gabriel Cerdà, el PSM nunca autorizará esta propuesta. «Antes tendremos que ver destruidos los greens, eso como mínimo», dice.