La marcha del tren en dirección a Manacor es ya imparable. Actualmente faltan sólo tres kilómetros para completar la línea Inca-Manacor, que une la capital del Llevant con Palma, a través de Petra, Sant Joan y Sineu, en unos 55 minutos. Así, con el desmonte del último talud que faltaba para unificar el trazado de la vía de Petra con la de Manacor, en la mañana de ayer se inició la cuenta atrás para que el ferrocarril del Llevant llegue a Manacor en un mes.
Antes de la inauguración definitiva y la puesta en marcha de la nueva línea ferroviaria a principios del mes de mayo, el president del Govern de les Illes, Francesc Antich, acompañado por el conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas, y demás autoridades, técnicos y medios, realizaron ayer por la mañana una visita por las obras del trazado del tren. La comitiva viajó en un tren especial desde el desvío de la variante norte de Petra hasta la estación del tren de Inca.
El president Antich remarcó el «buen ritmo» con el que transcurren las obras y valoró la reapertura de la línea Inca-Manacor, con el acondicionamiento de 30'6 kilómetros de vía, como un «paso importante para consolidar el transporte público, que sirve para cohesionar personas y territorio». De los tres kilómetros que faltan para dar por finalizadas las obras de la línea de enlace, el conseller Quetglas explicó que «aún queda el paso 14, la obra de fábrica más importante de esta actuación, en la intersección de la carretera Palma-Manacor-Petra». El acceso a Petra por el camino de Son Fogó, donde se ha instalado un puente sobre la trinchera por la que circulará el ferrocarril, también es otro tramo que aún está pendiente. El acceso de Petra por el cementerio es ahora el único cerrado al pueblo.