Los hoteleros y otras empresas o comercios de Alcúdia en los que el valor catastral de sus inmuebles supere los 600.000 euros, verán incrementada en un 25% el impuesto del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) o contribución urbana. La medida fue aprobada ayer por el equipo de gobierno PSOE-UM para adaptar las ordenanzas a la nueva normativa del Gobierno central, que suprime el IAE (Impuesto de Actividades Económicas) a todas las empresas que no superan el millón de euros en su facturación.
El alcalde de Alcúdia, Antoni Alemany, explicó que «se trata de compensar los ingresos que se dejarán de cobrar al suprimir el IAE a los pequeños empresarios, en total más de 600.000 euros, que es lo que se intenta recuperar aumentado el IBI a los grandes contribuyentes». Alemany quiso dejar claro que las medidas aprobadas no afectan a las viviendas, aunque éstas superen en su valor catastral los 600.000 euros y además se aplicará una bonificación del 90% de reducción del IBI a las familias numerosas. Alemany explicó que «se ha aplicado un principio impositivo de justicia tributaria. Se trata que los grandes contribuyentes paguen más y sean los que paguen los servicios».
Según los datos actuales, el aumento impositivo afectará a un 0,69% de los contribuyentes, en su mayor parte hoteleros y en cuyas manos se encuentra el 40% del patrimonio de Alcúdia. El PP, en la oposición, votos en contra argumentando que el Ajuntament no tiene aún los datos suficientes para aprobar estas medidas. La concejala Coloma Terrassa dijo: «El PP ha estado durante toda la legislatura en contra de aumentar impuestos, una tónica que ha caracterizado al equipo de gobierno de Alcúdia PSOE-UM».